jueves, 6 de junio de 2013

Frida Kahlo

Surrealismo, movimiento artístico que tiene una gran importancia dentro de la homosexualidad en el arte. Hay una personalidad que destaca de entre todas las demás en la vanguardia y que tiene especial protagonismo en esta temática. Hablamos por supuesto de la magnífica Frida Kahlo.

    Frida Kahlo es una artista surrealista, de izquierdas, con una vida llena de dolor físico y amor para entregar, mujer de Diego Rivera, abiertamente bisexual y una gran mente encerrada en un cuerpo tormentoso.

    A los 18 años sufre un accidente de autobús que transforma toda su vida ("Intenté ahogar mis dolores, pero ellos aprendieron a nadar"). No sólo la abandona su novio de entonces, Alejandro Gómez Arias, si no que le lleva por una vida repleta de operaciones, aparatos en la columna y dolores profundos y constantes que hacen de su pintura cargada de simbolismo una pintura tétrica y lúgubre. A partir de ahí se deja arrastrar por sus emociones, embarcándose en la vida política y conociendo y enamorándose de Riego Rivera, con quien más tarde se casa y con el que lleva una relación apasionada y violenta, con fuertes altibajos, divorcios, abortos, relaciones extra-matrimoniales pero también un fuerte amor y un profundo respeto y admiración que es latente en toda su historia. Incluso en su segundo matrimonio excluyeron del pacto las relaciones sexuales, que, por supuesto, no derivaron en una castidad de parte de ambos, si no que se traduce en numerosos amantes, masculinos y femeninos. Sin embargo, ella llevaba la relación con valentía y respondía por ella, llegando a decir: "Quizá esperen oír de mí lamentos de ‘lo mucho que se sufre’ viviendo con un hombre como Diego. Pero yo no creo que las márgenes de un río sufran por dejarlo correr."


    Frida Kahlo muestra una bisexualidad evidente. Ama a Diego Rivera pero no deja de tener amantes de los dos sexos. Muchas de estas amantes de la pintora son a su vez figuras célebres en el mundo del arte. Se la relaciona con Georgia O’Keefe, artista estadounidense, con Maria Callas, soprano griega, con Chavela Vargas, cantante costarricense (con quien se la ve en la fotografía) abiertamente lesbiana que en vida hizo declaraciones como la siguiente: “Nunca he estado con un señor, nací así, no lo presumo, tampoco lo pregono, pero no lo niego”.

    Su pintura tiene una carga simbólica absolutamente brutal. En todas y cada una de las obras que os pongo a continuación podríamos encontrar decenas de símbolos de temática diferente, que va desde el dolor que alberga en su corazón por no poder tener la vida que desea hablando en términos físicos hasta su infancia, pasando por temas sexuales, políticos, parentales, amorosos y un largo etcétera. Incluso en los bodegones. Si ampliamos un poco nuestra capacidad de comprensión entendiéndola más allá de lo que consideramos "normal", de lo que el resto de la pintura realista y la sociedad nos lleva a considerar natural, podremos abrir la mente y descubrir un trasfondo espectacular en la pintura de una mujer que se lo dio todo a la vida y que la vida le devolvió enormes palos. "Nunca pinto sueños o pesadillas. Pinto mi propia realidad" decía. Lo cual nos afirma lo complejo de su mente y sus experiencias. 





















    

sábado, 1 de junio de 2013

Martin di Girolamo

Inciso: Antes de que os ofendáis (como hice yo) he de advertiros que el nombre de una de sus colecciones es "Phatological beauty". Con lo cual, pese a tener un canon de "que buena estoy y que tipo tengo", no se excede, hay que llevar la mente y la moral con ella un poco más allá y notar la crítica.